Si te dijera que existe una píldora gratuita y de muy fácil acceso, que mejora enormemente tu salud física, emocional y mental, ¿la querrías???
Pues si es así sigue leyendo, porque esa píldora está en tu interior en diferentes formatos, y uno de ellos se llama “Coherencia Cardíaca”.
Vivimos en un mundo en el que el bombardeo de estímulos, responsabilidades y eventos parece no acabar nunca. Y esta forma de vivir, que llamamos civilizada, se cobra un alto precio, haciendo que la agitación sea cada vez una experiencia más frecuente en el día a día de millones de personas.
Dificultades para relajarse, cansancio, ansiedad, incapacidad de centrar la atención, desórdenes del sueño, problemas digestivos, alteraciones del ánimo… por solo nombrar algunas de las dolencias que hemos acabado por atribuir con naturalidad al estrés.
Un estrés que a día de hoy es considerado cómplice, si no causante directo de un porcentaje abrumador de enfermedades.
Y aunque la ciencia coincide en esto, también está empezando a apuntar al hecho de que, el estrés no es el malo de la película que siempre nos han contado.
CUANDO LAS COSAS NO SON LO QUE PARECEN
Ya en la década de los 80, allá por el siglo pasado, las investigaciones comenzaron a sugerir que el quid de la cuestión no es tanto lo que nos ocurre, sino la valoración que cada uno hacemos de las situaciones que nos estresan. Y esas investigaciones han sido corroboradas en nuestros días.
Los efectos del estrés dependen no tanto de las circunstancias, sino de la interpretación que hacemos de ellas.
Así que según esto, eres tú quien da el significado a las cosas que te pasan, y el efecto que causen en ti va a depender en gran medida de lo capaz que te sientas de hacerles frente o no.
En otras palabras: de los recursos y herramientas con los que sepas que puedes contar.
Y ahí es donde entra en juego la Coherencia Cardíaca.
Aunque el término es moderno y la explicación científica que lo avala también, lo cierto es que con esto, como con tantas otras cosas, estamos inventando de nuevo el hilo negro.
Según la revista científica Sanum
“Con el término de Coherencia Cardiaca se hace referencia a un trabajo armónico del corazón, a un patrón repetitivo y estable del ritmo cardíaco. Se trata de una coherencia psico-fisiológica que afecta o resuena en todos los órganos del cuerpo. Esta es una técnica muy novedosa en el campo de la neuro-cardiología y se basa en la relación del cerebro y del corazón (razón y emociones)”
Traducido a un lenguaje más nuestro: que cuando el corazón late de forma rítmica y estable, envía información de salud y bienestar al cerebro, y de ahí, a todo el cuerpo.
LA VIDA SECRETA DEL CORAZÓN
–Pero, ¿por qué es tan importante que el corazón lata rítmicamente?
Pues porque el tamborcito que tenemos en el pecho, no es solamente una bomba para mandar la sangre por el cuerpo. Es una potentísima y sofisticada centralita que recibe, produce y emite información vital para todo el organismo.
Formado en el embrión antes que el cerebro mismo, más de la mitad de sus células son nerviosas, y genera un campo electromagnético muy superior al de este.
Además, la información que va del corazón al cerebro es muchísimo mayor que la que fluye a la inversa.
Al parecer, no es ninguna tontería afirmar que el corazón marca el ritmo de nuestra vida.
Y es que nadie nos tiene que decir lo mal que se está cuando el corazón se agita, ni la sensación tan diferente que experimentamos cuando late tranquilo y confiado.
Este latir lento y rítmico envía, como si fueran las ondas de una piedrecita cayendo en un estaque, información de calma y bienestar que reverbera en el cerebro. Al entrar en resonancia con ese patrón de ondas regular y armonioso, nuestra materia gris transmite la buena noticia al resto del cuerpo, que lo celebra encantado.
Así se generan emociones renovadoras, como la gratitud, la alegría, la confianza, el amor y la felicidad; y esto se traduce, inevitablemente, en salud.
Pero también ocurre al revés: los pensamientos y las emociones que experimentamos afectan al corazón, y si estos no son armoniosos, la información que se transmite no juega a nuestro favor precisamente.
Por eso nos aplicamos en recordarles a nuestro corazón y a nuestro cerebro, que pueden estar en armonía y emitir hermosos patrones de ondas rítmicas y ordenadas.
TODO BENEFICIOS
La Coherencia Cardíaca tiene ya reconocidos notables efectos terapéuticos sobre la salud emocional, la tensión arterial, las capacidades cognitivas (como la concentración y la memoria), el alivio del dolor y la calidad del sueño.
Practicar intencionalmente la Coherencia Cardiaca es muy sencillo; se trata simplemente de aplicar tres de los principios de los que te hablo constantemente:
Respiración, Emoción y Atención (a la que solemos llamar también Mindfulness )
Podría resumirse de esta manera: “Un sentimiento elevado, y una respiración lenta, profunda y rítmica”
Si te animas a probarlo descubrirás que con un poco de entrenamiento cada vez te resultará más fácil conectar con ese estado; pero eso si!,
HAY QUE PRACTICARLO CON REGULARIDAD!!!
La buena noticia es que la sensación es enormemente agradable
MI REGALO PARA TI
Para acompañarte en el proceso he creado una pequeña meditación guiada que pueda servirte de ayuda mientras le coges el tranquillo.
Te llevará poco más de diez minutos, pero espero que sus efectos duren en ti mucho más!!.
Eso sí, te recomiendo que para sacarle el máximo partido la escuches con auriculares.
La salud y la vida no están en nuestras manos, pero hay muchas cosas que podemos hacer para que ambas sean una experiencia mucho más hermosa y satisfactoria.
Me alegrará saber si la Práctica que te ofrezco es para ti una de esas cosas.
Con mis mejores deseos, de todo Corazón
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